POR JOSÉ LUIS AMADO –PERIODISTA AGROPECUARIO- EXCLUSIVO PARA GRUPO LA VERDAD
Fada (Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina), acaba de publicar el nuevo informe trimestral. El mismo determinó que la participación del Estado, -en sus tres estamentos-, Nacional, Provincial y Municipal, se quedan con el 65% de la renta total. Es decir de cada $ 100 pesos que le quedan a un productos agrícola, el Estado se queda $ 65, cuando en diciembre pasado se quedaba con $ 59. Esto, lógicamente está dañando la renta agropecuaria.
Claro que no todos los niveles del Estado se quedan con la misma porción. La mayor porción se la lleva la Nación, con el 94% de ese 65%.
“El Índice subió 6 puntos desde la última medición de diciembre y los principales motivos son: suba de costos y caída de precios”, sintetizó Nicolle Pisani Claro, economista Jefe de Fada.
“La renta es el resultado de restarle los costos de producir al valor de esa producción. Si cae el precio o suben los costos, la renta se achica. Pero el tema es que los impuestos no se reducen en la misma proporción que la renta. Es por esto que cuando el valor cae o los costos suben, la participación de los impuestos sobre la renta aumenta. Esto es lo que arrojó esta medición, por eso el Índice Fada es 6 puntos mayor que la última edición”, indicó Pisani Claro.
Dentro de los impuestos nacionales, el 67% no coparticipa a las provincias, es decir, no vuelven a las regiones que lo produjeron. “De aquí se desprende la discusión sobre el federalismo de un esquema en el que la mayor parte de lo recaudado no se reparte a las provincias, en una actividad que por definición es federal y está arraigada a las distintas regiones del país”, destacó Natalia Ariño, Economista de Fada.
“Si nos detenemos en las provincias analizadas, vemos que Córdoba registra un 64,9%, Buenos Aires 61,9%, Santa Fe 61,1%, La Pampa 62,9%, Entre Ríos 65,4% y San Luis 59,9%. Para medirlo, se conjugan los rindes, los impuestos provinciales y locales, y los fletes, que generan efectos diferenciados sobre cada uno de los cultivos. Así como la proporción de cada cultivo en el área sembrada de cada provincia”, señaló Pisani Claro.
En esta medición en particular se consideraron los incrementos para el año 2024 del inmobiliario rural, como así también de las tasas y guías municipales.
La chicharrita
El vector ya es un dolor de cabeza para gran parte del área agrícola nacional. Los expertos anticipan un daño inédito en la zona núcleo. De todas formas, habrá que esperar la madurez de los lotes de maíz tardío para ponerle una cifra al impacto productivo y económico de esta enfermedad.
Según informan distintos técnicos de las zonas más afectadas, la presencia de la chicharrita se viene observando desde el mismo momento de la siembra del cultivo, pero es por estos días en que se ve su real daño en las plantas.
Lo que sí hay que destacar es la velocidad de avance territorial puesto que, si bien la enfermedad no es nueva y hay muchos investigadores que le han dedicado años a su estudio de este vector, esta es la primera vez que se manifiesta de manera masiva desde el NOA hasta el centro de la provincia de Buenos Aires.
Es una situación totalmente atípica, que puede generar un corte en el llenado, por eso habrá que esperar hasta el llenado de grano, pero se puede ya anticipar que va a ser superlativo.
Por su parte, especialistas en la enfermedad, han explicado que una de las razones de su desmedido avance tiene que ver con los tres años de seca, pocas heladas y la gran cantidad de maíces sembrados en distintas fechas de siembra de forma escalonada, por lo que se favoreció la dinámica poblacional del vector del virus, es decir la chicharrita.
Por el momento, y sin herramientas químicas efectivas para su combate, solo se está generando información y aprendizaje, sobre todo para la campaña que viene.
¿Escalonar o no?
Uno de los temas que se “coló” en el análisis de las razones por la que esta enfermedad avanzó hasta la provincia de Buenos Aires, es el tema del escalonamiento en la fecha de siembra, por lo que es muy probable que los semilleros empiecen a sugerir materiales puntuales y fechas de siembra coordinadas.
Otro tema no menor, tiene que ver con que se han prohibido productos que hoy serían de gran utilidad y llama la atención el silencio sobre este tema de las instituciones técnicas, fundamentalmente del Inta. Sugerencia: monitoree su lote y consulte a su asesor técnico.