Apostando por una gestión social y comunitaria de la educación, el Colectivo Juana Azurduy impulsa, desde Junín, una apuesta sostenida por fortalecer la democracia y el protagonismo juvenil en la región.
Con el convencimiento de que educar es también un modo de hacer política y construir ciudadanía, Juana Azurduy promueve espacios donde las juventudes sean verdaderamente sujetos de derecho y acción, protagonistas de procesos de transformación en sus barrios, escuelas y comunidades.
Durante los últimos meses, esa convicción se expresó en una serie de encuentros y jornadas que reúnen experiencias de participación juvenil, reflexión política y trabajo colectivo: el Encuentro Regional de la Juventud (Junín, 22 y 23 de agosto), el 9° Encuentro Provincial de Educación de Gestión Social, Cooperativa y Comunitaria de FeCEABA (Temperley, 26 de septiembre), los Encuentros del programa Jóvenes y Memoria de la Comisión Provincial por la Memoria (Pergamino y Chacabuco), y las asambleas local y zonal del programa Decisión Niñez de la Provincia de Buenos Aires (Junín, 19 de junio y 3 de octubre).
“La poética de lo colectivo y la potencia de soñar juntos para cambiar nuestras realidades” resume el espíritu de este proceso. Desde la experiencia comunitaria y una pedagogía del vínculo, la organización acompaña a las juventudes en el desafío de leer el mundo y transformarlo colectivamente.
“Cada una de estas instancias fue vivida como un espacio de construcción democrática, donde los y las jóvenes tomaron la palabra, debatieron sobre sus derechos y propusieron acciones concretas para mejorar sus barrios y su ciudad”, cuenta Virginia González.
El Encuentro Regional de la Juventud, organizado junto a organizaciones comunitarias, sindicatos, empresas con responsabilidad social, espacios culturales y experiencias de las economías regionales, permitió reafirmar la idea de que luchar es sinónimo de vivir y que la democracia se fortalece cuando se construye desde los territorios, con la participación real de las juventudes.
En el marco de FeCEABA, adolescentes de Juana Azurduy compartieron experiencias junto a educadores y familias, en una jornada donde la escuela fue pensada como espacio de escucha, pregunta y transformación, una escuela profundamente vinculada al territorio y comprometida con una educación emancipadora.
En los encuentros de Jóvenes y Memoria, se reafirmó el compromiso con la defensa del Estado de Derecho y los Derechos Humanos, generando espacios de diálogo donde las memorias del pasado se entrelazan con las luchas del presente.
Finalmente, en el programa Decisión Niñez, las juventudes del Centro Juvenil Juana Azurduy presentaron su proyecto de mapeo barrial participativo, orientado a fortalecer los espacios comunitarios y promover el derecho a la participación efectiva de las adolescencias en las políticas públicas. De este modo los jóvenes salieron a recorrer los barrios Prado Español y 11 de Julio, encuestando a más de 70 familias.
“Creemos en una democracia donde las decisiones se tomen junto a la comunidad. Nuestro compromiso es transformar la ciudad en un lugar más igualitario, donde la voz de las juventudes ocupe un lugar central. Esa es la ciudad que soñamos y por la que seguimos luchando”, expresan desde la organización.
El proceso que impulsa Juana Azurduy muestra que la democracia también se educa y se construye colectivamente: en el encuentro, en la palabra compartida y en la práctica cotidiana de quienes creen que otra forma de vivir y decidir es posible.
Fuente: Juana Azurduy
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