Escribe: Odontóloga María Ana Quintana.
¿Qué es ATM y para qué sirve?
La articulación temporomandibular (ATM) es la única articulación móvil que tenemos en la cabeza, y aunque es una gran desconocida interviene en funciones tan importantes como masticar, abrir y cerrar la boca, hablar, las expresiones faciales, etc.
Las partes de los huesos que se relacionan en la articulación están cubiertas de cartílago y están separadas por un pequeño disco que absorbe los golpes, que normalmente hace que el movimiento sea suave.
Cualquier trastorno funcional o patológico de localización en cualquiera de ellas será capaz de alterar la integridad de sus respectivos elementos constitutivos. Existen dos articulaciones apareadas, una a cada lado de la cabeza, localizadas justo en frente de los oídos.
Es una articulación muy necesaria y altamente empleada en nuestra vida diaria.
Cada articulación está compuesta por un disco cartilaginoso, músculos, ligamentos, vasos sanguíneos, nervios cercanos y, por supuesto, los dientes.
Cuando la articulación no funciona correctamente, puede dar lugar a algunos trastornos bastante molestos y dolorosos.
TRASTORNOS DE LA ATM
A menudo resulta difícil determinar la causa de esta afección. El dolor puede aparecer por una combinación de factores
¿Cuáles son los síntomas?
En las personas con disfunción temporomandibular, los problemas en la articulación y los músculos que la rodean pueden causarles síntomas, tales como:
• Dolor en la cara, mandíbula o cuello.
• Dolor alrededor, delante o en la oreja.
• Dolor en ambos lados de la cabeza.
• Dolor en un lado de la cabeza, que se activa al apretar los dientes.
• Dolor en los músculos y/o articulación de la mandíbula.
• Movimiento limitado o bloqueo de la mandíbula.
• Rigidez en los músculos de la mandíbula.
• Dificultad o molestias para masticar.
• Un cambio en la forma en la que los dientes encajan entre sí.
• Espasmos musculares alrededor de la mandíbula
Los más frecuentes son dolor localizado y chasquidos al mover la articulación.
Cansancio o espasmos en los músculos masticadores
¿CÓMO TRATAMOS LA ATM?
El tratamiento puede pasar por la aplicación de simples prácticas, por ejemplo, ingerir alimentos blandos o aplicarse hielo. Pero también puede requerir el uso de analgésicos o dispositivos para colocarse en la boca. El odontólogo valorará la situación de cada paciente para recomendar la aplicación de tratamientos conservadores o el uso de cirugía.
“Se recomienda solicitar atención profesional al momento que aparezcan síntomas de dolor persistente en la mandíbula o en caso de sentir que no se puede abrir o cerrar la boca por completo. El odontólogo analizará las causas y tratamientos según el historial de cada paciente y procederá a un tratamiento personalizado”.