El Millonario ganó 2-1 ante Boca y se quedó con el primer clásico del año, llevado a cabo en el Monumental.
En un Superclásico que llegaba con más valor anímico que competitivo, River fue quien terminó celebrando tras vencer 2-1 a Boca. Si bien en el Torneo Apertura ambos equipos ya tenían asegurados sus lugares en los octavos de final, el partido servía para medir dónde estaban parados, especialmente en el caso de Fernando Gago, que nuevamente dejó dudas cuando el contexto le exigió más.
Boca, que llegaba como líder de su zona y de la Tabla Anual, apostó a un planteo conservador con línea de cinco defensores, condicionado por las bajas en ataque. Esa decisión terminó costándole caro: se refugió demasiado, renunció a la iniciativa y volvió a mostrar falencias en los primeros tiempos, un problema que ya se había hablado puertas adentro. River, con un once básico y sin inventos, fue superior desde el arranque. El golazo de tiro libre de Franco Mastantuono —cada vez más cerca de la Selección— fue el premio para un equipo que apostó por su presente y no por promesas a futuro.
Germán Pezzella, más allá de su título mundial, sigue mostrando signos de desgaste y tuvo responsabilidad en el gol de Miguel Merentiel, uno de los pocos que le dio pelea a la defensa de River. Sin embargo, el “Millonario” no se desesperó: Sebastián Driussi volvió a encontrarse con el gol y antes del final del primer tiempo puso en ventaja a su equipo, desatando la ilusión en el Monumental. En el complemento, el partido se abrió un poco más, con un Boca obligado a salir que nunca supo cómo hacerlo y un River que, aunque también sufrió algunas distracciones, tuvo la suerte y la eficacia de su lado.
Gago volvió a fallar en la lectura del partido. Los cambios, lejos de darle respuestas, profundizaron la confusión de un Boca que terminó siendo presa de su propio miedo. Gallardo, en cambio, logró un triunfo que no solo sirve en la tabla, sino que le devuelve un poco de crédito ante su gente en un momento en el que la confianza estaba resquebrajada. A partir de ahora, los playoffs pondrán a prueba tanto al entrenador de Boca como a un River que empieza a soñar con algo más.
Franco Mastantuono, figura del Superclásico: ya escribió su nombre en la historia del “Millonario”
El talentoso joven de 17 años abrió el marcador en el River vs Boca con un impresionante tiro libre.
El juvenil Franco Mastantuono no solo fue la gran figura del Superclásico entre River y Boca, sino que también dejó su huella histórica.
Con apenas 17 años, el talentoso mediocampista rompió el cero en el Monumental con un golazo de tiro libre que abrió el camino para la victoria del “Millonario” y lo consagró como el jugador más joven del club en marcar en un clásico ante Boca, superando el récord de Javier Saviola.
La obra de arte llegó a los 25 minutos del primer tiempo, tras una infracción de Marcos Rojo sobre Sebastián Driussi. Mastantuono tomó la pelota con total personalidad, y con un zurdazo preciso la clavó en el ángulo, dejando sin respuesta a Agustín Marchesín.
El Monumental explotó en festejos y el joven de 17 años, 8 meses y 13 días, se consolidó aún más como una de las grandes joyas del fútbol argentino, despertando el interés de varios gigantes europeos.
Tras el partido, el propio Mastantuono valoró lo conseguido tanto en lo personal como en lo colectivo: “Fue el partido que más esperé desde que estoy en Primera. Fuimos justos ganadores, este equipo tiene mucho carácter”.
Sobre la estrategia de Boca, que sorprendió con una línea de cinco defensores, el juvenil fue claro: “Nunca cambió nuestro plan”.
Además, reveló un consejo clave que recibió de Gonzalo “Pity” Martínez: “Me dijo que no me enfocara en el exterior”, dejando en evidencia su madurez a la hora de afrontar este tipo de partidos.
Con su actuación en el Superclásico, Franco Mastantuono no solo alimentó el sueño de River en el torneo, sino también la ilusión de los hinchas de la Selección Argentina, que ven en él a una figura que, a fuerza de talento, pide pista para la celeste y blanca. El futuro ya llegó, y lleva el sello de Mastantuono.