El 2024 fue un año de consagración para Lola Hernando. Sus múltiples podios la posicionaron como una de las gimnastas más destacadas de nuestra ciudad. Con una técnica excelente y una pasión inigualable, Lola tuvo grandes logros como clasificarse para el Mundial 2025 en Japón, un logro que la llena de orgullo y motivación para seguir superándose.
Lola comenzó a practicar gimnasia artística cuando era una niña un tiempo después tuvo un breve paréntesis pero volvió a conectar con esta disciplina a los 11 años incentivada por su mamá que la veía con una gran habilidad en su casa para la acrobacia y el movimiento, ahí decidió continuar entrenando de manera constante y disciplinada, convirtiendo la gimnasia en una parte fundamental de su vida.
Al poco tiempo de retomar con la actividad Lola comenzó a competir algo que le genera mucha pasión. En su día a día valora la amistad y compañerismo dentro del deporte, pero no deja de remarcar la adrenalina y empuje que le genera la competencia “Lo que más me gusta del deporte, primero que todo es la amistad con mis compañeras, me gusta mucho pasar tiempo con ellas y después las competencias, cuando paso a hacer la coreo ahí al frente de todos, me gustan los torneos, ya a los 12 años empecé a competir y no pare”.
La gimnasia es una disciplina que exige una preparación física rigurosa. Para alcanzar la excelencia en este deporte, se requiere un entrenamiento constante y demandante. Lola, bajo la tutela de Laura Zabala, sigue una rutina de entrenamiento muy completa. Tres veces por semana, las alumnas realizan un intenso trabajo físico que combina fuerza, flexibilidad y resistencia, todo esto complementado con la práctica especializada de la gimnasia artística.
Con apenas 14 años, Lola, viene demostrando su gran talento y dedicación que le permitió subirse a varios podios en diversas competencias nacionales de manera individual. Pero sus logros trascienden las fronteras, ya que ha logrado clasificar a importantes eventos internacionales como los Sudamericanos, Panamericanos y, lo más destacado, al Mundial en Japón. Esta joven promesa del deporte demuestra que, con esfuerzo y pasión, los sueños se hacen realidad.
Conseguir clasificar a competencias internacionales de gimnasia es un logro inmenso, pero llegar hasta allí implica superar diversos obstáculos. Uno de los mayores desafíos es el costo económico que conlleva participar en estos eventos. A pesar de su talento y dedicación, Lola aún no ha podido viajar a las competencias internacionales a las cuales clasificó, debido a limitaciones económicas. Sin embargo, no se rinde. Con la ilusión de representar a su país, Lola y su familia están organizando rifas y buscando diferentes formas de recaudar fondos para hacer realidad este sueño.
Como todo deportistas Lola tiene sueños en cuanto a su carrera deportiva, pero en este momento su mayor anhelo es poder mostrar su talento en otros países “con trabajo y esfuerzo capaz, que sí logro llegar a viajar y competir en el Sudamericanos, en el Mundial y en el Panamericano. Me gustaría realizarlo ya que también es uno de los sueños que tengo poder viajar a otros torneos. Por ahora sueño con eso”.
El 2024 fue un año especial ya que logró conseguir importantes reconocimientos “mi año fue la verdad muy lindo, me encantó competir, como la pasé, mejoré mucho, la verdad que el año pasado mejore bastante y tuve buenas posiciones en todas las competencias y eso me gustó, básicamente todo lo que hice. En lo individual mis mayores logros fueron quedar en podios importantes, conseguir buenos puestos nacionales y eso es lo que te habilita a clasificar al próximo Mundial”.
Pero este año que recién empieza va a ser una etapa de desafíos y cambios ya que Lola cambia de categoría, de 14 años a una categoría de 15 a 17 años y desde ahora puede implementar elementos en su rutina “esto me genera un poco de ansiedad ya quiero poder hacerlo, algunos me empezaron a salir, pero hay otros que todavía me falta más práctica”. A estos nuevos cambios se le suma el anhelo por querer viajar este año al Mundial y al Sudamericano “creo que para mí viajar es lo que más me gustaría además del de Japón hay otros proyectos de viaje, por ejemplo, Sudamericano”.
Es fundamental en un joven deportista el acompañamiento de su familia “le quiero agradecer más que nada a mis padres por bueno por pagarme lo que sería las competencias y todo eso y porque siempre me apoyan para que sigan adelante y poder conseguir más. También más que nada a Laura, mi entrenadora, que me ayudó también a poder desarrollarme en este deporte y lograr lo que estoy logrando ahora y también a mis compañeras que me apoyaron al igual que mis padres”.